Son numerosas las relaciones de parejas pasivas y rutinarias, condicionadas a través de los años con patrones de conducta disarmonicos, son círculos viciosos, mujeres que viven con falsas esperanzas o autoengaños como: “el va a cambiar”, “será distinto cuando los hijos crezcan”, “todo mejorara con un nuevo trabajo, cuando paguemos deudas”, así muchas mujeres viven relaciones tormentosas.
El perfil de estas mujeres se caracterizan por relaciones con parejas que son proveedores pero ausentes física y afectivamente, integrantes de familias disfuncionales, con falsas apariencias ante familiares y amistades, soportan infidelidad, adicciones, maltratos físicos y psicológicos que justifican con argumentos como: mis padres tenían una relación similar, yo no podría vivir sola, que dirían mis familiares y amistades, sin ingresos económicos, mis hijos sin sus dos padres juntos, negándose de esta manera a lograr una independencia con bienestar y armonía personal y para sus hijos.
Analiza tu relación: existe respeto y confianza de y hacia tu pareja, demostraciones de afecto y apoyo, tiempo y actividades compartidas, proyectos conjuntos, acuerdos y buena comunicación, de no ser así busca la opinión de un especialista en terapia de pareja que te ayude a despejar dudas y encontrar soluciones, tomar decisiones y sobre todo modificar tu situación actual. No esperes llegar a crisis, agresiones, afectarte emocionalmente.
En terapia de pareja trabajamos los siguientes aspectos:
1. Tomar conciencia de los problemas que se presentan en la relación.
2. Mejorar la comunicación con la escucha activa y la expresión adecuada de lo que
pensamos y sentimos.
3. Recuperar las muestras de cariño y la confianza, mejorando así la intimidad.
4. Que cada miembro respete el espacio personal del otro.
5. Facilitar que ambos miembros adquieran flexibilidad para manejar situaciones,
aprendizajes
6. Creación de nuevos espacios, tiempos y proyectos en común.
Esta en tus manos, vivir una relación de pareja armoniosa en la cual cada uno pueda brillar con
su luz propia sin hacerse sombra al otro.
Dra. Olga Siavichay Vélez
Psicóloga Clínica- Psicoterapeuta